Comentario de la pintura: "Estructura inconsciente de dos y manos"


Se trata de una composición surrealista del inconsciente de la pareja en la que se ven y diferencian muy claramente las posiciones que toman tanto lo masculino: emisor del mensaje superfluo que convenciona lo exterior en vano y su comunicación tan complicada a través de la maraña que suponen las relaciones con lo femenino: aquello en constante movimiento creador y crítico que socava la realidad en busca de principios de rareza que, como minerales preciados, enriquezcan la vida, la saquen del convencionalismo que se expresa con la burda dialéctica.
Asimismo, esa búsqueda en el inconsciente colectivo entraña la posibilidad de encontrar un sustrato esencial o divinidad intraterrena y bien femenina de la sociedad en "lo que encierra el triángulo", metáfora de la matriz uterina que alimenta la actividad humana y su expresión cultural.