Caligrama



donde espera el abandono
sostenido en el aire, 

se encuentra el tiempo apartado y sus descartes
seguir a las hormigas por el suelo
caminar en círculos
respirar con ganas
mirar por la ventana
silbar por la calle
las matemáticas
ordenar los libros
sonreír por nada
la muda de una lombriz que quiso seguir tragando tierra 

para avanzar triunfante