la magia es como una bofetada


el momento gira despacio
comprendiendo el aire exótico
junto a la espera continua

deseo de tantas cosas
y el transcurso de las mejillas impermeables
obedeciendo a cada ilusión

la modesta paradoja, atenta al espectador
se va colocando a sus espaldas
y lo apuñala con cosquillas de rencor

en verdad la magia es como una bofetada
ejemplo verdadero de ternura
que se deleita satisfecha con la contrariedad

entretanto la complicidad desaparece
entre las voces inoportunas
que campan a sus anchas de manera grosera
flores secas de impertinencia

nosotros entreabrimos la puerta
para que el hurto se perpetre
dejamos salir lo perdido de antemano
y sonreímos al ver su ausencia